“YA ME PARECÍA A MÍ QUE ERAS DEMASIADO HUMANA, PARA SER HUMANA”

La Teniente Ripley a Annalee Call cuando descubrió que era un robot (Alien Resurection)


jueves, 12 de septiembre de 2019

¿MONARQUÍA NEUTRAL?


O, ¿POR QUÉ HE REVISADO MI DECISIÓN DE ABSTENERME EN LAS PRÓXIMAS ELECCIONES?


Un artículo publicado este verano, reportando la visita de Pedro Sánchez al rey Felipe VI en su residencia de vacaciones en Palma de Mallorca explicaba que después de rendir cuentas al Monarca sobre el estado de las negociaciones con Pablo Iglesias para un Gobierno de Coalición, Sánchez decidió acabar con ese discurso y comenzar a negociar con Iglesias la situación improbable del Gobierno de Cooperación. Tan improbable, que el propio titular del artículo ya habla de preparar las elecciones del 10 de noviembre.
Siento no tener suficiente información ni contactos como para comprobar la relación de causa y efecto entre la visita al rey y el giro en las relaciones entre Sánchez e Iglesias. Pero, en principio, no veo razones por las que no hubiese que deducir la existencia de esa relación.
He estado unas cuantas semanas sin pensar en el asunto; pero ahora que llegamos al final de la negociación imposible y que asoma ahí mismo la convocatoria de nuevas elecciones se me ocurre que tiene muchísimo sentido que el monarca haya decidido hacer un paréntesis en su neutralidad, y “sugerir” modificar la orientación del curso de las negociaciones, porque visto en profundidad, le va en ello seguir disfrutando de una vida de “no pocos sacrificios” que le financiamos entre todos los españoles. 
No es fácil aceptar siendo rey que se instale un ferviente y confeso republicano en el Gobierno de la Nación que supuestamente, va a durar cuatro años. Y ¿quién sabe lo que puede suceder en ese período de tiempo? 
Y, ¿qué mejor solución que convocar elecciones cuando las encuestas (en esos días de Julio) no son muy favorables al odioso republicano?
Pero, ¿qué le quedará por hacer a ese rey si los españoles estiman que, a pesar de todas las intrigas palaciegas (y nunca mejor dicho), siguen pidiendo un gobierno de coalición entre las izquierdas?
De momento rezarle a dios (este rey es católico confeso) para que con un poco de suerte nos desmovilicemos los izquierdosos cansados de ese teatro que llevan representando los "negociadores de los partidos de izquierdas" y la derecha se haga de nuevo con el poder, con lo cual todo queda de acuerdo al “orden natural” del poder en las Españas cañíes.  
No sé si es cierta o no la existencia de esa relación de causa y efecto; pero ante la sospecha de que la hubiere, voy a cambiar mi decisión de abstenerme, mal que me pese y, a pesar de que estos dos sujetos de la izquierda me parezcan de poca presentabilidad voy a votar a uno de ellos tapándome la nariz en la mesa electoral. 
¡¡¡TODOS LOS DE IZQUIERDAS A LAS URNAS!!! (que los de derechas van seguro)


miércoles, 28 de agosto de 2019

A VUELTAS CON EL TRANSHUMANISMO


¿Una realidad deseable? ¿Una Utopía? ¿Una Distopía?

Empezaré por declararme Transhumanista. Y como tal, creo y confío en que el próximo paso evolutivo del ser humano va a venir de la mano de la incorporación de tecnología al cuerpo y consecuentemente supondrá la transformación y redefinición del concepto “morfología humana”.

La pregunta inmediata que nos hacemos los transhumanistas al aceptar este proceso como necesario para la evolución del ser humano en la Tierra que, de momento es el único planeta que nos acoge, es acerca del alcance del proceso. 

¿Hasta donde puede llegar?

Sabemos como comienza la incorporación de tecnología al cuerpo, pues la medicina hace tiempo que empezó a otear el horizonte de este territorio, pero desde luego, no podemos alcanzar a imaginar hasta donde puede llegar. Pues la tecnología hoy se encuentra en un punto muy incipiente, aún muy alejado de su techo de desarrollo. Y ¿quién es capaz de decir con qué instrumentos tecnológicos vamos a contar, ya no digo en ese término abstracto que denominamos “el futuro”, sino a finales de este año, del lustro actual, de la década próxima? 

Imaginaos que cada vez que falla un órgano vital lo sustituimos por otro mecánico imperecedero. Ya tenemos un hígado que va a sobrevivir a nuestro cuerpo perecedero, y unos riñones y unos pulmones y un bazo y una pierna, y ¿un corazón? Sí, también un corazón. 

Hace unos años cuando empezaba el boom de las impresoras 3D, nos fuimos al Poble Nou porque ahí un grupo de científicos estaban desarrollando esta tecnología. Nos decían que dependiendo del tipo de “materia prima” que pones en la máquina, así tienes un resultado u otro. Ponías yeso y salía una escultura; ponías sangre y salía… Aquel experto nos decía que el objetivo de ese grupo de trabajo era contar con un corazón en diez años. 

Pues han tardado mucho menos de 10 años. El pasado mes de Abril la Universidad de Tel Aviv anunció la creación con éxito de un corazón artificial mediante una impresora 3D.

Y ¿que cabe pensar si vamos sustituyendo poco a poco, nuestros órganos, tejidos, cartílagos, líquidos y demás componentes corporales, por otros imperecederos?

Nos asusta pensar en que a eso se le podría llamar la vida eterna.

Y en que tendrá consecuencias en conceptos filosóficos cual es la ética y los distintos cuerpos de creencias.

Todo este discurso, naturalmente, sirve para los componentes de la Humanidad que participamos de la evolución como punto de inicio del hombre en la Tierra. Para los creacionistas todo esto es anatema y los que defendemos el evolucionismo mereceríamos ir directamente a la hoguera.

Y aquí quiero parafrasear a Stephen Hawking quien decía que “Cuanta más ciencia, menos dios” y su afirmación: la moderna ciencia no deja lugar a la existencia de un Dios creador del Universo.

De este modo ya han comenzado a aparecer los primeros Cyborgs en el mundo. 

Yo he tenido la suerte de conocer al primero de ellos: Neil Harbisson. Coincidimos dando una conferencia en Shanghai. Yo hablaba sobre como construir la imagen de una ciudad a través del deporte y él sobre como convertirse en un cyborg para conseguir superar una deficiencia de nacimiento. 
Neil nació sin poder distinguir los colores. Veía el mundo en blanco y negro; y luchó muchísimo contra la incomprensión de todos los cuerpos de medicina científica con los que contactó, hasta conseguir que un equipo de médicos ingleses le implantaran en el cráneo, un adminículo que le llegaba desde el occipital hasta el frontal para poder ver la vida en color. Ahora tenéis que ver como viste. Parece un arco iris. 

Mi admiradísimo Elon Musk, acaba de crear una empresa de neurotecnología: Neuralink, cuyo objetivo es el desarrollo de interfaces implantables relacionando cerebro-computadora. 


Y el resultado físico de esas interfaces son unas fibras cuyo grosor equivale a la tercera parte de un cabello humano que, implantados en el cerebro, te permiten interactuar con toda clase de dispositivos tecnológicos.  

Esto que parece Ciencia Ficción es una realidad hoy mismo. 

Por cierto, en la visita que hicimos el pasado febrero al M.I.T. en Boston, nos dijeron que utilizaban la ciencia ficción para determinar los campos de investigación a explorar. Allí pudimos ver avances neurotecnológicos muy avanzados que vienen a dar viso de realidad a todo lo que estoy comentando aquí.


Y, a propósito, en el territorio de la ficción, os voy a recomendar dos cosas:

La primera es que veáis este clip producido por Donna Haraway para Lady Gaga titulado prefiero ser una Cyborg a una diosa. 


Es verdad. Es ficción, pero pronto podría dejar de serlo. 

Y que no os perdáis una mini serie de 6 capítulos producida por la BBC, titulada “Years and Years”, con unos guiones y una dirección de actores tan magníficos como los que nos tiene acostumbrados esa productora.
Bueno, hay que decir que el guion de esta serie tiene que pagar tributo al marketing televisivo y en algunos casos muestra una cara bastante primaria. Lo cual se nota en algunas secuencias de las que yo personalmente prescindiría

Pero dicho esto, y aunque pueda parecer una distopía, a mí me ha parecido una evolución bastante realista hacia el mundo futuro inmediato que estamos creando si las condiciones actuales por las que transita la Humanidad no cambian. Temas como la inmigración, la manipulación de la información, la homofobia, la intolerancia, son protagonistas de ese futuro hacia el que previsiblemente nos encaminamos. Personalmente, como soy como Zapatero “Optimista antropológico”, espero sinceramente que hagamos cambiar pronto todos estos valores del populismo rampante, por la cuenta que nos tiene. 

En esta serie, la evolución de la robótica y la del transhumanismo se trata de una manera bastante ponderada e interesante. Como un gran paso evolutivo de la Humanidad. Y siempre teniendo en cuenta que hablamos de un entretenimiento televisivo. 

Y por último, ¿El transhumanismo tendrá alcance universal, o solo se lo podrán permitir los más poderosos?

En mi opinión pasará como con todas las nuevas tecnologías; empezarán en la cúspide de la pirámide social y solo serán unos cuantos privilegiados los que tendrán acceso, haciendo así aún mayor la brecha social entre países pobres y ricos y entre clases sociales poderosas y masivas. 

Pero presumiblemente y como ha sucedido con todos los inventos, por intereses macroeconómicos, después irán descendiendo por la pirámide social hasta la base. 

Yo fui un niño que creció sin TV, porque estaba sólo al alcance de las élites económicas, y hoy tenemos una tele en cada habitación, incluyendo la del lavabo. 

Insisto en el título de mi blog: El mundo será mejor, te lo juro

Bellaterra, 28 de Agosto de 2019 

jueves, 8 de agosto de 2019

DESINTOXICACIÓN DE ADICCIONES.



Hace un par de meses viendo un capítulo de la serie Black Mirror, un tipo que se declaraba “adicto a las redes sociales” decía: Lo primero que hago al levantarme es entrar en la red; y también es lo último que hago antes de ir a dormir. 

Me di cuenta entonces, de que ese era mi caso, y decidí dejar de lado esa adicción. 


Quizás no debería dejar de hacer notar aquí que, si bien un guión televisivo ayudó a abrirme los ojos, este no fue más que un catalizador de las advertencias que diversos familiares muy allegados me iban haciendo y a los que no hacía mucho caso. Y también es una suerte haber podido tenerlos a mi lado cuando el síndrome de abstinencia me atacaba, porque lo creáis o no, cuando decides salirte de esto ese síndrome se hace patéticamente presente.







Como decía Wyatt Earp a sus hijos en una gran película de los años 90, “al final lo único que os queda y con lo que podéis contar es la familia”









Desde ese momento dejé de pasearme por Facebook, subir fotos a Instagram, e incluso, dejar de participar en grupos de whatsapp.



 Y es que para los que somos de naturaleza (o formación) adictivos, las redes sociales son una llamada a la desmesura. 

Cuando fui fumador llevaba esa práctica hasta el desquiciamiento. No fumaba más porque no había más tiempo en el día.

En nuestra época hippy tuvimos una gran suerte, y no caímos en el consumo de estupefacientes a pesar de que el LSD y la marihuana eran consustanciales con el pensamiento de la época. Muchas veces hemos comentado a nivel familiar que si hubiésemos entrado en ese mundo habríamos sido unos consumidores tan desmesurados que quizás no estaríamos aquí ahora para contarlo. 

Nuestro grupo de amigos con los que compartíamos vida y pensamiento anduvimos buceando por filosofías que condenaban el consumo de estupefacientes como dañinos y contrarios a nuestro voluntarioso espíritu de trascendencia de la condición humana, al que nos empeñábamos por aquellos tiempos 

Desde el mundo de lo arcano, hasta las filosofías orientales que impregnaron esos preciosos años de nuestras vidas nos ofrecieron argumentos y fuerza para resistir la tentación de echarnos al cuerpo un canuto o un poco de ácido lisérgico. Y ahora después de tantos años sigo sin saber lo que es un trippy. 

Pero aparecen en tu vida las llamadas redes sociales que yo llamaría redes pescadoras y anuladoras de personalidades y tu naturaleza adictiva te hace caer preso de patas en ellas. 

Te justificas diciendo que has hecho nuevos amigos, que has recuperado amigos de la infancia, que tienes una red de amigos con los que compartes, pensamientos y aficiones, y tal y tal y tal. 

Pero también coliges que eres testigo, cuando no partícipe, de una siembra de odio y mala baba hacia aquello que no forma parte del universo de tus preferencias; que te rodea y que, si no eres fuerte puede llegar a capturarte. 

Y por no hablar aquí de los excesos y mala educación de fanáticos de ideologías sean políticas, religiosas o de cualquier otro tipo, que se expresan con vómitos de bilis verbal y horrendas faltas de ortografía que hacen daño a la sensibilidad de los que en algún momento de nuestras vidas nos hemos preocupado por mejorar los usos de nuestro idioma.

De la misma manera que he hecho nuevos amigos también he de decir que he roto con antiguos amigos, porque he visto por aquí algunos de sus valores que me han generado un rechazo no solo visceral, sino también intelectual y afectivo; y a los que no he querido seguir manteniendo con esa consideración de amistad.

Y es que la red social en sí misma tiene valores positivos y negativos y todo depende del criterio con que la utilices. 

Hace tiempo (como cuatro o cinco años) leí una novela del género negro, en la que el asesino era un fetichista que mataba mujeres que vestían una marca concreta de zapatos, que no menciono aquí, por razones obvias. En aquellos tiempos twitter empezaba a ser la red más adictiva de todas (no sé si aún lo sigue siendo). 
Pues bien, el asesino en cuestión seguía a sus víctimas a través de twitter donde la elegida en cuestión iba contando su vida minuto a minuto diciendo lo que hacía, con quien estaba y donde. 
Le resultaba facilísimo atacarlas en el mejor momento para la fechoría.




Vivo en una zona que las aseguradoras tienen calificada como de alto riesgo de asalto a las viviendas. 

Es un regalo a los amigos de lo ajeno que vayas contando en cualquiera de las redes, cuando no en todas, que día te vas de vacaciones y si estás en casa o fuera. 

Y te dices a ti mismo: Ja! Este no es mi caso. 
Pero cuando revisas unos cuantos meses de tu actividad en las redes, te das cuenta de que ingenuamente, y por compartir tu vida con los amigos, has ido contando mucho más de lo conveniente. 

Y te preguntas ¿Por qué carajo lo hago? ¿Por qué quiero compartir si estoy sentado en el inodoro o lo estoy haciendo en Bali? ¿De verdad tus amigos tienen interés en saber que haces en cada momento?

¿No será que lo que estás haciendo es el pavo real, presumiendo de estar aquí y allá y de ser el más listo de todos, el que más viaja, el que más come con amigos, el más simpático y dicharachero, el que más….todo?

Eso se define con una palabra: Vanidad. 

Siempre he dicho que el mundo se mueve en base a tres motores: 
la vanidad, la codicia y el sexo. 

Hay quien me dijo: y… ¿dónde dejas el poder? 

Piénsalo un momento. ¿Qué es el poder?

Un escaparate de la vanidad, una forma de conseguir colmar tu codicia y un imán para atraer a otras personas y tener sexo con ellas. ¿O no?

Dicho todo esto, no voy a demonizar ninguno de estos instrumentos de relación social, ni por supuesto, voy a tratar de convenceros de que salgáis de las redes por piernas, pero sí que yo pienso navegar por ellos con cautela y a dosis controlables. 

Que tengáis muy buen verano.

Bellaterra, 8 de agosto de 2019. 

miércoles, 17 de abril de 2019

CREATIVIDAD Y LONGEVIDAD



CREATIVIDAD Y LONGEVIDAD

Hace un par de meses asistí a un espectáculo de declamación poética a cargo del actor argentino Hector Alterio. Me impresionó ver a un hombre de 94 años en el ejercicio de su profesión cara al público que abarrotábamos el teatro de la Juventut de L’Hospitalet.

Ayer me volvió a suceder algo parecido. José Sacristán a sus 81 años interpretó el monólogo de Miguel Delibes de poco más de una hora de duración dedicado a la memoria de su esposa titulado “Mujer de Rojo sobre fondo gris”. Por cierto, la falta de respeto hacia el artista demostrada por los tosedores y enfermos de la conexión móvil que son incapaces de estar desconectados una hora, obligaba al actor a detener su monólogo a la espera del silencio que obliga cualquier función teatral. Hace unos días leía una tira cómica en la que un nieto le pregunta a su abuelo: ¿Qué es un teatro?, a lo que responde: “Un sitio donde la gente va a toser. 

Estos hechos artísticos, me devolvieron a mi antigua teoría de que la gente creativa es más longeva que la que no lo es. Lógicamente en términos generales, pues no todos los creativos son longevos ni todos los longevos son creativos, pero esa relación causa efecto ya hace tiempo que me ronda por la cabeza. 

Me puse a mirar unos cuantos casos, en la historia de la creatividad artística y me encontré algunos sobresalientes (entre otros muchos). A saber:

Manoel de Oliveira dirigió su última película a los 105 años; murió dos años después


Clint Eastwood sigue dirigiendo películas a los 88, y por el bien del cine esperemos que sea muy longevo. 

Oscar Niemeyer diseñó su última obra en Belo Horizonte a los 102 años. Falleció a los 105. 

Dos guitarristas que España regaló al mundo: Joaquín Rodrigo a los 97 años y Andrés Segovia a los 94.

Nuestro pintor más universal Pablo Ruiz Picasso, murió “con el pincel en la mano” a los 91.

Goya murió a los 82, lo cual tenía mérito dada la expectativa de vida de la época. 

Y si pensamos que el en Renacimiento la expectativa era de 30 años, hay que pensar que la mente creativa dio largas vidas a Tiziano (100) y Michelangelo Buonarroti (90)



Y tres creadores de bandas sonoras para el cine y la televisión que aún siguen trabajando:

 
Ennio Morricone, 90

Lalo Schifrin: 86

John Williams: 87


Y si me permitís la cosa anecdótica, los 75 años de Keith Richards y Mick Jagger, contarían como un centenar, teniendo en cuenta los procesos de autodestrucción a los que han sometido a sus cuerpos a la “búsqueda de los placeres mundanos”. 

Buscando en el universo Internet, encuentro que “estudios científicos recientes (¡vaya Vd. a saber cuales!) estiman que el secreto de la longevidad se basa en una actividad mental obsesiva y polarizada en una sola dedicación o trabajo; una senda bien marcada por la que se camina sin vacilación, con entusiasmo inquebrantable y permanentemente renovado. El proceso de creación artística verdadero es, por tanto, el garante de estas conductas y formas de vida, su ejemplo más significativo. 

En otras palabras, y como aviso a navegantes: Vale la pena centrarse en un tema creativo y obsesionarse con él, en lugar de ir por ahí picoteando para conseguir vivir muchos años.

Lo tengo crudo, amigos. 

Bellaterra, 17 de Abril de 2019. 




















lunes, 4 de marzo de 2019

MOBILE WORLD CONGRESS (MWC): 
EL SHOCK DEL FUTURO

Me he permitido echar mano de ese título con el que Alvin Toffler me produjo una de las mayores inquietudes sobre la dirección del futuro que tuve en mi primera “juventud madura” allá por el año 1970.

Algo así he experimentado estos días visitando esta feria en la que el mundo de la tecnología se empeña felizmente en utilizar nuestra ciudad como plataforma para contarnos como ven “lo que va a pasar”.

He sentido una sobresaturación de oferta tecnológica, que en algunos momentos me ha hecho enviar a la porra a tanto vendedor vestido de lagarterana del siglo XXI ofreciéndome el paraíso.

Mi paseo por las instalaciones de la Fira, me ha permitido percibir una gran exhibición de los tres pilares sobre los que se sustenta el futuro de la tecnología y, consecuentemente, el del ser humano.

Y se pueden resumir en tres categorías tecnológicas, las actividades cuyo desarrollo van a incidir en un nuevo diseño del mapa geopolítico mundial, al que algunos intelectuales ya definen como la nueva guerra fría del siglo XXI

1.   5G. 
2.   Inteligencia artificial.
3.   Robótica.

Las nuevas generaciones de hardware telefónico (aparatos flexibles, con tapa, sumergibles, irrompibles, en relojes, en gafas y hasta en textiles, así y asao) pasaban desapercibidos ante el aluvión de software decidido por el advenimiento de la comunicación 5G.

Cuando dos puntos distantes en el globo terráqueo se comunican en fracciones milimétricas de segundo…amigos… ¿a qué le llamábamos antes distancia?

¿Tenemos imaginación suficiente para pensar en las posibilidades que nos abre ese hecho?  

Si apelo a mis lecturas de las últimas semanas, se puede estimar que los ámbitos que permiten un mayor desarrollo de la aplicación de las redes 5G serán, aparte de los obvios de envío y gestión de datos, el mundo de la medicina y el de la automoción

Cuando en una provincia de China o del África Central un enfermo tarda días en llegar a un hospital para que le diagnostiquen, y ahora el médico rural se acerca con un aparato móvil que le pone en contacto con el hospital más lejano de forma inminente y le ofrece un diagnóstico en minutos, nuestro futuro se impregna de esperanza. 

También en el contexto del MWC, hemos podido ser testigos de una operación quirúrgica dirigida por un cirujano situado a kilómetros del quirófano y con la inapreciable ayuda de la tecnología 5G cruzada con la robótica. 

Y la pregunta que siempre surge ante cualquier avance tecnológico capaz de cambiar la vida de las personas es: “¿pero… podrá ser de aplicación universal?”

Yo me preguntaba de niño si alguna vez podría ver imágenes en un aparato que se llamaría pantalla y que cuando empezó solo podía ver en escaparates fuera del alcance de mis posibilidades, y fijaos lo que veo ahora. Lo mas avanzado que podíamos imaginar entonces nos lo enseñaba Dick Tracy, que hablaba por un reloj de muñeca. 

Probablemente sí será un proceso selectivo al principio (como sucede con todo) del que solo disfrutarán ciertas élites, para luego extenderse masivamente urbi et orbi. 

Y, por supuesto, con la particularidad de que la velocidad de implantación de los avances tecnológicos es ahora infinitamente mas rápida que la de los años 50s.   

Si cruzamos esta tecnología con la cada día más omnipresente inteligencia artificial, no nos queda más remedio que imaginar nuestro futuro inmediato (casi podríamos decir presente en movimiento) como seres humanos en un entorno de facilitación de nuestras vidas que no tiene límites.

Los fabricantes de automóviles estaban ahí para mostrarnos a todos como han convertido los auto-móviles en robots dotados de toda serie de recursos comunicativos y de seguridad que hacen que lo de conducir sea “otra cosa”. 

Lo de los robots, por cierto, lo veo un poco más lento de lo que a mí personalmente me gustaría, pero creo que es la filosofía y la ética lo que contiene su desarrollo, porque lo que es de tecnología, están sobrados los fabricantes de robótica. 

No me cabe duda de que aquí se encuentra el gran “Shock del Futuro”, y me refiero a la aplicación de la Robótica, unida a la AI (Inteligencia Artificial) y a la velocidad de transmisión de datos 5G. Y nos lo han enseñado aquí en la hermosa ciudad de Barcelona. 



Desde otro punto de vista, no todo va a ser inteligencia constructiva. 

Permitidme que os cuente un “avance tecnológico” que me hace pensar en que nos estamos volviendo lelos: 

Un reloj que contiene un teléfono móvil. Suena el tfno. y le quitas la corona que rodea la esfera y te la cuelgas de una oreja a modo de earphone. Y sigues la conversación desde semejante adminículo. Lo dicho, tontitos, tontitos. 

Pero también os contaré algo que me ha conmocionado y que le da sentido a la palabra Esperanza aplicada al futuro del Ser Humano. 

Y es un caso de filantropía. 

En el salón anexo al MWC, llamado 4YFN (For years from now) y dedicado a las start ups que se supone que en unos años serán grandes compañías en el mundo, se cedieron espacios a intervenciones de diversas índoles, tecnológicas, empresariales, creativas…

Todos sabéis que el hombre más rico de China se llama Sr. Ma y es el inventor de Ali Baba, la tienda virtual más grande del mundo.

Pues bien, Ali Baba ha creado un fondo de investigación titulado “Tech for Change” (Tecnología para el cambio) dedicado a grandes obras sociales.


A lo largo de un par de horas, se dio voz a los protagonistas de media docena de casos para los que Ali Baba dotó presupuesto para ayudar a paliar grandes problemas de diversas índoles, desde la reducción del hambre infantil, pasando por la aproximación a la universalización de la medicina, o a la protección del elefante africano en la zona de Masaï Mara.

Que una empresa multimillonaria emplee parte de sus beneficios a ayudar a los más desprotegidos, me parece un hecho que se debe publicitar y utilizar como ejemplo a imitar. 

Ya sé que la RSC está moviendo a muchas empresas hacia ese territorio, pero este caso me ha parecido sobresaliente, por su acción más allá de las fronteras de un país o un continente.  

Siempre será menos de lo que se necesita, pero aún menos es no hacer nada. 

Esto me recordó cuando la Fundación Bill and Melinda Gates destinó un par de cientos de millones de dólares, para luchar contra una de las enfermedades endémicas de África, se les criticó porque siendo tan ricos destinasen tan poco. 

Me parece injusto que se diga eso cuando hay tantísimas empresas que no destinan un solo centavo a filantropía. 

En fin, con este canto a la esperanza, cierro este pensamiento que me ha sugerido mi visita a esa feria tecnológica tan impresionante que nos revela el que será 

EL SHOCK DEL FUTURO…DE NUESTROS HIJOS

Bellaterra, 4 de marzo de 2019