“YA ME PARECÍA A MÍ QUE ERAS DEMASIADO HUMANA, PARA SER HUMANA”

La Teniente Ripley a Annalee Call cuando descubrió que era un robot (Alien Resurection)


domingo, 25 de agosto de 2013

ATMAN ONE - ARTISTA BUDISTA


ATMAN ONE

A veces uno tiene la suerte de toparse en la vida con artistas capaces de vivir en su arte o de hacer que su arte sea su vida o, ¿como decir?, haciendo que no exista una frontera entre su arte y su vida.

Atman One es uno de esos personajes. Quizás es uno de esos ejemplos de coherencia que uno se encuentra por ahí. Él es budista hasta los tuétanos. Dicen que no hay otra manera de ser budista que esa.

Es un hombre que ha decidido vivir integrado en lo que él considera la esencia del universo, y cuando pinta o cuando toca la flauta (la de la foto me dijo que tenía más de un millar de años), siente que está en comunión con el principio universal y refleja sobre el lienzo aquello que siente.

Luego te lo explica y como no es muy difícil que te lo haga entender, disfrutas intensamente de la contemplación de su obra.

Pues creo que eso es lo mejor de la experiencia mística: el poder transmitirla.

Él sin ánimo prosélito me habló sobre el budismo y su por qué.
Yo le dije que para mí ya era una etapa, no quiero decir superada para no parecer muy cretino, pero sí perteneciente a otro momento de mi biografía personal.
 Y no quise entrar al trapo de la discusión sobre como el genuino deseo de trascendencia del ser humano había sido pervertido por los creadores de dogmas, religiones y liturgias. Y cómo eso estaba destruyendo al ser humano, haciéndole entrar en guerras para imponer su pensamiento a los que divergen de él. Y tal y tal y tal. Máxime cuando ese debate se ha de desarrollar con un hombre pacifista.
La historia del pensamiento está plena de este tipo de diatribas. Y es a los filósofos a los que siempre les ha tocado debatir.


Pero mi resumen es que agradezco enormemente que Atman One se haya encontrado en mi camino, y que incluso vayamos a poder tener la oportunidad de caminar juntos un rato por esta impensable China.

Es un hombre limpio con el que se puede razonar abiertamente, y que te hace revisar algunos pensamientos que yacen ahí en el fondo de tu cabeza o de tu corazón. Vaya usted a saber.  

martes, 20 de agosto de 2013

EL DEBATE SOBRE CENSURA DE CONTENIDOS EN LA TELEVISIÓN


EL DEBATE SOBRE CENSURA DE CONTENIDOS EN LA TELEVISIÓN

Hace unos días que vengo siguiendo lo que está ocurriendo con un programa de Tele 5 de esos que, aunque la gente los llame basura, no deja de verlos ni un momento.

Me refiero a “Campamento de verano”. Cuando salió la noticia de que una marca de comida basura -Chunk food dicen los americanos- (también se le llama así en algunos ambientes) se marchaba de un programa ídem por estimar que el contenido no era apropiado a su imagen, me sonreí (hacia adentro, claro), por el oportunismo de la marca en cuestión. Y por la maravillosa oportunidad que había sabido descubrir para conseguir eso que antes llamábamos Publicity y que ahora ya no sé como se quiere llamar, pero que en definitiva es conseguir espacio redaccional gratuito para tu marca.

Eso sí, con una grandilocuencia y dignidad propia de una gran marca de transcendencia social, y tomándonos a todos por gilipollas (perdonad la expresión, pero define bastante bien lo que quiero decir). Y ¿cómo no?, unos días después su enemigo mortal de toda la vida al que no consigue ganar en imagen ni con polvorones, anuncia lo mismo. Pero, ¿a quien quieren engañar esos dos adalides del puritanismo conservador americano, por no llamarlo de la hipocresía más rancia?

Yo, personalmente, estoy absolutamente en contra de consumir los contenidos que nuestras excelsas emisoras televisoras nos largan por la cosa catódica y ahora también en forma de bits cyberviajeros. Pero esa es mi decisión. Y no voy a ponerme a discutir ahora si la tele ofrece lo que la gente quiere consumir o la gente consume lo que la tele quiere ofrecerles. Ese programa no era mejor antes de “humillar” a una chica que se había prestado a ese juego yo diría que voluntariamente, porque no he sabido que nadie la forzase a desnudarse a su pesar. Y además obteniendo su magro rédito en popularidad al estilo de (los 5 minutos de gloria a los que todo el mundo aspira, que diría Warhol)

Pero lo que me parece más interesante es el debate que ha puesto sobre la mesa Marcos de Quinto, como presidente de Coca Cola, al negarse a la presión (chantaje diría yo) de un grupo de salvadores de la moral pública que están tratando de persuadir a los anunciantes de que boicoteen ese programa retirándoles el apoyo publicitario.

Y tiene toda la razón Marcos cuando dice que no va a ceder a intentos de instauración de un formato subrepticio de censura de contenidos.

Y vaya por delante que a mí, personalmente la programación de este tipo de contenidos me repugna, pero quiero decir bien alto que a pesar de la importancia “social” desde el punto de vista cuantitativo de la audiencia que tienen esos programas, no he visto ni un solo programa de Gran hermano, ni de la Noria, ni del horror (Sálvame) que protagoniza un tal Javier nosecuantos al lado de la “princesa del pueblo” (vaya tragaderas que tiene el pueblo, por cierto). Y es que si no te gusta, no lo veas. Pero que porque te ofenda te pongas a chantajear a anunciantes, programas y emisoras, y por tanto a todo el colectivo de profesionales que viven de ello, no lo comparto. Y en esto es exactamente en lo que estoy de acuerdo con Marcos.

Eso sucedió en Alemania durante los 30s del siglo pasado, y en Rusia durante demasiado tiempo y en el país en el que ahora vivo, sucede constantemente. Y es que la delación, la amenaza y el chantaje al que no piensa como nosotros, es autoritarismo. Y tiene distintos nombres dependiendo del lado del espectro político en el que se encuentre, que no voy a repetir aquí por archiconocidos.

Ahí va una anécdota relacionada con el tema, de hoy mismo. He  reclamado a China Mobile por la falta de velocidad de mi ADSL. Tengo contratadas 20mB (fibra óptica; o sea High Tech), y solo recibo 2 o 3 en el mejor de los casos.
Ha venido el técnico, ha probado y me ha dicho que recibía las 20 mB. Pues explíquemelo porque cuando yo hago el test, a mi no me pasa. Sí verá, es que yo he probado con websites chinos y funciona perfectamente. Pero si lo que Vd. quiere es conectarse con el extranjero, los filtros hacen que la velocidad decrezca. Y es que la información aquí está “filtrada” o sea censurada.

Por eso, cuando Marcos ha dicho que no cede a ningún modo de intentar establecer la censura de un contenido, me he puesto totalmente de su lado.

Y permitidme considerar algo que emerge cada vez con gran intensidad e importancia, y es el poder de las redes sociales, como expresión del pueblo. Pues veréis, sí. Es verdad, ahí se percibe poder popular, pero que pena, no? Que pena que en la primavera árabe haya servido para cambiar un autoritarismo de derechas por un fanatismo fundamentalista.
Y por aquí, que pena que solo sirva para favorecer a unos fabricantes de hamburguesas en lugar de servir para algo verdaderamente útil y trascendente. O es que para eso no sirve?

Para qué están sirviendo todas las protestas sociales a través de las redes? Para expresarse sí, Y para que más? El establishment se carcajea.

jueves, 1 de agosto de 2013

UNA SUPERSTICIÓN (ENTRE OTRAS MUCHAS)


CUENTOS CHINOS. DE VERDAD

UNA SUPERSTICIÓN
(ENTRE OTRAS MUCHAS)

En algunas de las culturas occidentales, el número 13 ha sido el de la mala suerte, y para qué hablar si cae en martes : 13 y martes ni te cases ni te embarques.  Y en el mundo anglosajón, en Viernes.

Bueno, pues aquí (en el reino del centro, que es lo que significa la palabra China en chino: Zhong Guo) los números malditos son dos: el 4 y el 14, y la razón es debido a que la pronunciación de 4 se asemeja mucho a la de la palabra “muerte” y la de 14 a “es muerte”.

14:                    Se pronuncia: Shísì
es muerte:       Se pronuncia: Jiùshi sî

La verdad es que escrito no tiene nada que ver:

14:                     十四
Es muerte:       就是死

Pero el lenguaje oral, manda.

Y se lleva hasta las últimas consecuencias, hasta el punto de que hay edificios que pasan del piso 13 al 15 y si se trata de un edificio con empresas americanas, como por ejemplo un Hotel Internacional, directamente se saltan dos pisos del 12 al 15

Naturalmente, si en un hospital te dan la cama 14 te entra un yuyu terrible.

A mí se me ocurrió que podía ser una forma de dar una mala noticia a un enfermo:
Doctor, es grave lo que tengo?
 Bueno, le vamos a poner en la cama 14 mientras le hacemos unas pruebas.

Ya está todo dicho.

Eso me recordó a ese viejo chiste en el ejército que le piden al sargento Ramírez que, como es muy diplomático la dé a Meléndez la noticia de que se ha muerto su padre. El sargento forma a la tropa y dice: Los que tengan padre que den un paso al frente….!Tú quieto, Meléndez.”